Santo Domingo.- La República Dominicana ha realizado diversos esfuerzos y llevado a cabo importantes iniciativas para eliminar la violencia basada en género. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos y conquistas, la violencia sigue constituyendo una de las principales violaciones a los derechos humanos en el país.
Entre los grandes avances, se cuenta con con la Ley 24-97 sobre Violencia Intrafamiliar, donde se reconoce el género de forma explícita como una categoría sociocultural que se asigna a hombres y mujeres, que produce una desigualdad que desfavorece a mujeres y niñas. También en materia legislativa, la República Dominicana tiene la oportunidad de hacer historia a favor de los derechos humanos de las mujeres con la reforma del Código Penal, acogiendo las observaciones del Poder Ejecutivo en cuanto a la despenalización del aborto en tres causales.
Pero estos avances no son suficientes; el país todavía no cuenta con una ley integral para prevenir, atender y sancionar la violencia de género que resulta en 200 homicidios de mujeres cada año. Las niñas también son víctimas de esta violencia, de 86 feminicidios cometidos en 2016, 8 fueron adolescentes o niñas y en 2017, 4 menores de edad han sido víctimas de feminicidios. En la mayoría de los casos han sido niñas o adolescentes viviendo en pareja, o siendo exparejas de hombres adultos mayores que ellas. Estos casos causaron la indignación y el reclamo de la sociedad dominicana.
Un estudio sobre actitudes y prácticas acerca de la violencia basada en género en escuelas y colegios privados, realizado por agencias del Sistema de las Naciones Unidas junto al Ministerio de Educación, reveló que 1 de cada 5 de escolares reportó haber sido tocado por un adulto, o que un adulto intentó tocarlo, y que casi el 8% ha sido molestado sexualmente por un familiar. Además, encontró que casi 8 de cada 10escolares valida la creenciade que “muchas mujeres con su conducta sacan de quicio a los hombres” y por eso son víctimas de violencia.
La República Dominicana debe seguir esforzándose para cambiar valores y patrones de conducta. Erradicar la violencia requiere transversalizar el género desde los programas que apoyan a las familias en el cuidado de la primera infancia, y en los currículos educativos. El Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (INAIPI), el Ministerio de Educación y las escuelas tienen un rol importante en el desarrollo del individuo, siendo estos los espacios idóneos para cambiar los estereotipos de género que inciden en la violencia.
El Sistema de Naciones Unidas ha contribuido, con la elaboración de normas internacionales relativas a servicios esenciales para las víctimas de la violencia, así como con directrices técnicas para ayudar a los países a aplicarlos. Seguimos trabajando para cambiar actitudes discriminatorias y normas sociales que permiten que persistan los abusos. Romper el silencio es una necesidad. La violencia contra las mujeres y las niñas, en todas sus facetas, es una violación de los derechos humanos y de la democracia. Hablando de ella, educando a los niños y niñas en igualdad de género, haciendo prevención, defendiendo a las víctimas y castigando a los agresores, se puede erradicar.
Para más información:
Si bien el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer se conmemora el 25 de noviembre, se ha proclamado “Día Naranja” el 25 de cada mes con el objetivo de crear conciencia sobre el problema de la violencia contra las mujeres y las niñas de forma continua. Esta iniciativa forma parte de la campaña del Secretario General: ÚNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres.
La sociedad dominicana puede participar a esta campaña, cada persona desde sus diferentes ámbitos de acción.
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