Los estudios sobre mortalidad materna en República Dominicana generalmente se han enfocado en los aspectos biológicos o clínicos, alrededor de la gestación y el parto, sin considerar otros determinantes socioculturales –incluido el género–, que también inciden en la ocurrencia de las muertes maternas. Existen condicionantes sociales estructurales que, unidos a factores clínicos, resultan cada año en la muerte evitable de gran cantidad de mujeres durante el embarazo, el parto, el postaborto o el puerperio.
Asimismo, se ha documentado ampliamente que los servicios de salud sexual y reproductiva en el país se encuentran caracterizados por la deshumanización, que afecta la calidad de la atención en salud hacia las mujeres (Barinas, 2012). Esto se manifiesta en prácticas ofensivas y perniciosas por parte del personal de salud, y en la postergación o delegación de la atención, que pone en riesgo la salud y la vida de las mujeres.